Mirada triste. Le puedo definir así. Como una bonita mirada triste, si es que una mirada triste puede ser bonita.
Le conocí porque había que conocerle y mis ojos buscaron los suyos que escapaban de todo.
El destino nos cruzó una tarde y al menos pude mirarle despacio.
Una vida dura, un pasado extraño, sueños inalcanzables… No pude saber cuál era el motivo de su mirada.
Pude saber de su nueva vida, de un futuro que está empezando.
Quise conocerle más, descubrirle nuevas sonrisas.
Las circunstancias nos ayudaron y fui colándome en sus ojos, encontrando muros y pasadizos, timidez y dolor.
La vida no había sido como tenía que ser y él había aprendido a aparentar estar bien para no preocupar.
Pero no puede evitar la mirada triste que yo le quiero quitar.
Vértigo
5 comentarios:
te expresas genial... Es muy bonito
Colarse en la mirada de alguien es de las cosas más maravillosas que te pueden pasar en este vida.
Eso sí, ten cuidado con las tempestades, ¡que a veces las hay! Lleva chubasquero y sobre todo, explora y disfruta (y luego nos cuentas).
Niña imantada lo dijo todo.
Te sigo :)
Un beso!
Cuidado con las almas atormentadas... son muy atractivas, pero a veces sale una mal parada de intentar arreglarlas :S
Suerte princesa.
mua
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