jueves, 23 de mayo de 2019

La novela

¿Has visto happythankyoumoreplease? ¿Recuerdas la escena cuando ella le dice que a él le gustan las historias cortas y que ella ya está preparada para la novela? Puede que no sean las palabras literales pero esa era la idea.

Se acordó de la escena de la película mientras sacaba un folio en un avión y pensaba qué iba a escribir. Los vuelos siempre la inspiraban. Puede que fuera no tener con quien hablar, no poder perder el tiempo con el móvil o quizás era una manera de no meterse en sus pensamientos. 

Siempre se había dicho que escribía por necesidad y era verdad. Aunque a veces escribiera poco, sabía que le faltaba algo. Aunque cuando más triste estaba, más le costaba. 

Pensó en sus historias cortas, donde se sentía más cómoda.  En cierta manera era como sacar todo de dentro del tirón, sin pensar demasiado, sin sentir a veces, simplemente dejando el boli correr. 

Una vez al año intentaba escribir algo un poco más largo, nunca más de diez hojas, para un concurso en el que había convertido en costumbre participar. Era como una obligación que le gustaba, aunque siempre lo terminara en el último momento, aunque siempre pensara que debería dedicarle más tiempo.

¿Para cuándo la novela?, se decía alguna vez. En el vuelo volvió a pensarlo. ¿Y si seguía prefiriendo historias cortas? Podría explicar que siempre pareciera que estuviera o a punto de romper o nada más empezar con él y que su relación de años a veces fuera tan intensa como algunas relaciones cortas. Aunque, en el fondo, eran estables y eso la confundía. ¿Sería él su novela?

¿Estaría preparada para dar el paso? Escribir una novela le ilusionaba y le aterraba a partes iguales. Seguramente como pensar en un futuro con él. ¿Quizás ir escribiendo capítulos? No le parecía nada fácil. En casa de sus padres seguía teniendo un cuaderno que dijo que utilizaría para escribir su novela. Seguía en blanco. Igual que seguía el folio que había sacado. Ni siquiera estaba escribiendo. 

Puede que fuera el momento de empezar su novela o al menos intentarlo. Miró por la ventanilla y se dijo que ya lo pensaría con los pies en la tierra.


Vértigo