La noche empieza delante del espejo, línea en el ojo, rimmel y sombra oscura. Movimiento de pelo y ensayo de mirada felina.
Después algo de tacón y un poco de escote, dulce colonia en las muñecas y brillo en los labios. Estoy preparada para darlo todo.
Una casa, pizza y tortilla. Se abren regalos, se hacen fotos y se canta el cumpleaños feliz. Un poco de tarta y un ron con limón. Un sándwich de nocilla mientras se escucha algo de música. “Marta me llamó a las seis hora española, sólo para hablar, sólo se sentía sola”. Hago una perdida a una amiga que sonreía en un concierto con esta canción.
Un poquito más de tarta y una copa más. Empiezo a perder la cuenta.
Algo de brillo en los labios y preparados para continuar la noche.
Bailes, risas, abrazos, besos. Canción tras canción que no recordaré. Suenan acordes conocidos y sonrío, aunque el sitio de mi recreo me produce sentimientos confusos.
Otra canción que también olvidé y vuelvo a bailar. Cantamos de nuevo el cumpleaños feliz y se hacen más fotos. Estamos pasándolo bien.
El rimmel empieza a correrse, la sombra a difuminarse y ni se intuye el brillo de labios.
Más abrazos, más miradas cómplices perdidas, menos miradas al móvil buscando perdidas.
Todavía es pronto. Miro la hora, las cuatro y media. Aunque parece que nada cambiará.
Hasta que reconozco las primeras notas de una canción. No puede ser, sería demasiado pedir. Empiezo a cantar. “Casandra vio en sueños el futuro”. Mis amigos no la conocen. Me da igual. Sigo cantando, sonriendo, bailando. “Creo en ti Casandra. No estás sola”.
Se acaba la canción y yo sigo sonriendo. Suena una canción cualquiera y vuelvo al mundo. A dar abrazos, besos y a hacer fotos.
No queda demasiado para que salga el sol. Busco un taxi y vuelvo a casa.
La noche termina delante del espejo, eliminando los restos de maquillaje y observando mi cara de sueño. Pero no puedo evitar sonreír recordando que Ismael Serrano sonó a las tantas en un local de moda de madrid y que pude gritar “Creo en ti Casandra”.
Vértigo
15 comentarios:
Parece una noche de fiesta cualquiera. Suelo odiarlas, quizá porque nunca suenan Antonio o Ismael.
Pues sí, sí que es raro que te pongan Ismael Serrano en un garito. Eso es que alguno que trabajara allí quería cerrar la noche con su música.
Me alegra que lo pasaras tan bien. A mí últimamente las noches de fiesta me sientan mal incluso antes de la resaca.
Un beso.
Bueno al menos Ismael le alegró la noche en que no llegó lo que esperaba. Lindo relato, como siempre intrigante de principioa fin. kisses;)
Ismael es mi compañero de rutas desde el 2002. Un amigo de la universidad me mostró su música. Luego yo a mi ex novia. Nos pasaban tantas cosas mientras lo escuchabamos. Lo escuchamos tanto que llegó a transformarse en la banda de sonido para hacer el amor.
Salud Vértigo.
Lo peor es desmaquillarse jejejej, será por eso que no me maquillo demasiado. No no es normal lo de Ismael...
Un beso vecina!
Oh...ismael serrano!!
Tengo que esperar hasta mayo para que pase por aquí:)
muá!!
PD:me gustó la forma de describir la noche.
Puedes no esperar y puedes intentar buscar otra alternativa, pero mientras la buscas...estarás esperando...;)
muá reina!
¿Es curioso cuando una de esas canciones especiales te alegra la noche, verdad? Yo nunca las espero, porque normalmente, no voy a locales que pongan esa musica que me hace vibrar... pero a veces, el dj de turno te sorprende. :)
Yo tengo ganas de una noche como la tuya...
Un bestio, bonita!
Me alegro de que te guste.
Escribo poco sí, parece que me cuesta encontrar las palabras...
Está bien eso, de que aparezca Ismael, entre todo lo banal...
Un abrazo ;)
Adoro esas noches que parecen iguales a las anteriores, pero en las que de repente, ocurre algo que la hace diferente. En tu caso una canción. Sí... necesito una noche de esas^^
Escucharé esa canción de Ismael Serrano. Tiene buena pinta!
Un abrazo!
Casandra es el personaje mitico griego que más me atrae. Es triste pero demasiado real. Es simbólico y a la vez no. Me encanta esa dualidad que posee.
Y qué bien sienta!!!
Besotes gordos.
Excelente Vértigo, es único que suceda una cosa de estas de la forma que lo describes, genial forma de escribir.
Sólo pasaba a saludar...
Es raro que te ocurra eso. Pero esas canciones son las que hacen que recuerdes una noche cualquiera. Un saludito!!!
Me alegro un montón de haber encontrado tu blog, adoro como escribes, te leo y sin saberlo me dibujas sonrisas y la expresión cansada de mi cara cambia. Eres fantástica, estoy leyendo tus entradas anteriores y son geniales (y nunca hago eso, a veces encuentro un blog que me interesa, leo una entrada, como mucho hasta la tercera si me gusta.. pero el tuyo es genial).
Y en cuanto a Ismael Serrano... cómo e gustaría que lo escucharan mis amigos... como mucho se saben alguna de Silvio... pero sí, en el súper, en la peluquería, en la carnbicería... cuando empieza a sonar por sorpresa una canción suya, me entra un nosequé en la garganta y algo me cambia. Si pudiera tan sólo un café con él, no más, un café.
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