Regreso con la sensación de haber vivido un mundo nuevo, unos sentimientos diferentes, una vida distinta.
Lo hago sabiendo que nada habrá cambiado, que seguirás donde te dejé y me tendrás donde me dejaste.
Seguiré suspirando, inventando historias, llorando algunas noches. Seguirás olvidando contestarme, disculpándote, sin parar a mi lado.
De nuevo unas noches en un mundo paralelo hacen que vuelva pensando, analizando, sintiendo…
Aunque dirás que siempre estoy así al volver… Sea en un avión o en el autobús de todos los días.
Y puede que tengas razón. Y sólo sea otra excusa para escribirte y mandarte un beso.
Vértigo